El atentado ha generado una fuerte reacción política y social. Exmandatarios del Grupo IDEA han condenado el ataque y han pedido vigilancia internacional sobre la situación política en Colombia. Además, el episodio ha revivido el trágico recuerdo de su madre, la periodista Diana Turbay, quien fue asesinada en 1991.
Las autoridades están investigando el caso y han identificado a una mujer que habló con el sicario momentos antes del ataque. La Policía y el CTI de la Fiscalía están analizando videos y testimonios para esclarecer los hechos.
La Fundación Santa Fe de Bogotá emitió un segundo parte médico sobre el estado de salud del senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay, quien fue víctima de un atentado el pasado 7 de junio de 2025 en la localidad de Fontibón, Bogotá. Según el comunicado, Uribe Turbay continúa en estado crítico, con un pronóstico reservado, lo que indica que su evolución médica sigue siendo incierta.
El informe, firmado por el doctor Adolfo Llinás, director de la Fundación, señala que el político fue sometido a procedimientos neuroquirúrgicos y una cirugía en el muslo izquierdo para controlar los daños sufridos. Posteriormente, fue trasladado a cuidados intensivos para su estabilización postoperatoria.
Fuentes médicas han indicado que el disparo que recibió en la cabeza provocó una fractura craneal, aunque sin afectación directa a la masa encefálica, lo que abre una mínima ventana de esperanza. La intervención quirúrgica incluyó una craniectomía descompresiva, procedimiento utilizado para reducir la presión intracraneal en casos de trauma severo.
El atentado ha generado una fuerte reacción en el país. Líderes políticos y exmandatarios han condenado el ataque, calificándolo como un atentado contra la democracia. El expresidente Álvaro Uribe lo describió como un crimen contra “una esperanza de la Patria”. Desde el exterior, el secretario de Estado de EE. UU., Marco Rubio, atribuyó el ataque a la “violenta retórica izquierdista” en Colombia, sugiriendo responsabilidad del presidente Gustavo Petro.
Las autoridades han desplegado un equipo de más de 30 investigadores para esclarecer los hechos. Se ha identificado al presunto atacante, un menor de edad, quien fue capturado tras un forcejeo con escoltas y agentes de seguridad.
Este atentado marca un punto de inflexión en la política colombiana, reavivando el debate sobre la seguridad de los líderes políticos y el clima de violencia en el país. La evolución médica de Miguel Uribe Turbay será clave en los próximos días para determinar el impacto de este hecho en el panorama electoral.