El 30 de junio falleció en Bogotá Nydia Quintero de Balcázar, ex primera dama de Colombia y fundadora de la Fundación Solidaridad por Colombia. Tenía 93 años y fue una de las figuras más queridas del país por su incansable labor social. Su muerte ocurrió en la Fundación Santa Fe, el mismo hospital donde su nieto, el senador Miguel Uribe Turbay, permanece internado tras el atentado que sufrió el 7 de junio. La noticia fue confirmada por su nieta, María Carolina Hoyos, quien escribió: “Hoy el cielo recibe a una gigante: la dama de la solidaridad. Gracias por ser mi mamá de la vida, mi refugio cuando perdí a la mía”.
Nydia Quintero fue primera dama entre 1978 y 1982, durante el gobierno de su entonces esposo, Julio César Turbay Ayala. En 1975 fundó la Fundación Solidaridad por Colombia, organización que ha beneficiado a millones de personas en situación de vulnerabilidad a través de programas de educación, salud y nutrición.
Su legado fue reconocido por líderes políticos, sociales y culturales. La Fundación la despidió con estas palabras: “Transformó la ayuda en amor colectivo y convirtió la solidaridad en una forma de vida”.
La muerte de Nydia Quintero ocurrió a pocos pisos de donde su nieto Miguel Uribe permanece hospitalizado. Según su hermana, María Carolina Hoyos, la familia decidió no contarle a su abuela sobre el atentado, pero ella parecía intuirlo: “Una hora antes del ataque, le dijo a la enfermera que había que ponerle un trapito blanco en la cabeza a Miguel”. Las honras fúnebres se realizarán en el Capitolio Nacional y la Catedral Primada, antes de su cremación.
En medio del duelo, la familia Uribe Hoyos recibió una noticia alentadora: la recuperación de Miguel ha sido “absolutamente milagrosa”, según su hermana. El senador fue sometido a una cirugía compleja apenas 20 días después del atentado, un procedimiento que normalmente se realiza a los tres meses. La operación fue exitosa y el neurocirujano Fernando Hakim salió del quirófano con una sonrisa que lo decía todo: “Una sonrisa de oreja a oreja, eso lo dice todo”, relató María Carolina.
Miguel Uribe permanece en cuidados intensivos, con pronóstico neurológico reservado. Ha sido sometido a múltiples procedimientos, incluyendo traqueostomía y gastrostomía, mientras los médicos evalúan si extraer un proyectil alojado en su cabeza o iniciar un proceso de despertar inducido. Mientras tanto, miles de ciudadanos se han unido en cadenas de oración y mensajes de apoyo. La familia mantiene la fe intacta, convencida de que el milagro está en marcha.
En la misma clínica donde una generación se despide, otra lucha por seguir. El país entero acompaña a la familia Uribe Turbay en este cruce de caminos entre la pérdida y la esperanza. Porque a veces, la vida y la muerte se encuentran en el mismo pasillo… y el amor es el único puente entre ambas.